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¡Emprende!

¿Quieres empezar tu propio emprendimiento?

¿Qué te parece tener la oportunidad de aprender más sobre el mundo laboral y de negocios? Cuando termines tus estudios tendrás que empezar a trabajar y a ser productivo, y a veces esto es muy complicado, especialmente por falta de experiencia.

Hay algunas formas de adquirir la experiencia y las destrezas que las personas necesitamos para emprender un negocio o desarrollarnos en nuestra vida laboral. Te vamos a dar algunos consejos para que puedas empezar y de paso consigas ganancias con las actividades que emprendas:

Puedes utilizar tu tiempo de vacaciones o el que tienes libre luego de clases para dedicarlo a tu emprendimiento, es importante que no comprometas tu tiempo de estudios. Habla con tus padres o representantes, comparte tu proyecto y pídeles el apoyo que necesitas para realizarlo.

Para saber en lo que puedes emprender, lo primero que tienes que hacer es identificar las necesidades que tú podrías satisfacer en el entorno al que piensas llegar; algunos ejemplos son:

 

- Pasear mascotas.

- Dar clases de alguna materia que domines (inglés, matemáticas, etc.).

- Enseñar computación a los adultos mayores.

- Lavar los carros de tus vecinos.

- Cuidado de niños.

- Limpieza de casas.

- Ayuda en la organización de eventos.

- Elaboración y venta de comida, golosinas, artesanías o manualidades.

- Arreglo de jardines, etc.

 

Conoce los precios que puedes llegar a cobrar por el servicio que brindes. Para ello consulta cuánto cobran las personas o empresas que dan este servicio de forma profesional y tú rebaja el precio para que tengas oportunidad de ser contratado o que tus productos se vendan fácilmente.

Promociona tus servicios, es decir, trata de llegar a todas las personas que podrían ser tus potenciales clientes. Que ellos conozcan que tú puedes ayudarles con lo que necesitan.

Una vez que consigas algunos clientes, piensa que tienes que ofrecer un buen servicio y que las personas se queden satisfechas y te contraten nuevamente, para ello:

  • Empieza a llevar una “agenda” con todos tus compromisos de trabajo. Trata de que coincidan siempre con tu tiempo libre y que no se cruce con el trabajo ofrecido a otro cliente. Lleva además un registro del dinero que ganas y trata de invertirlo (si necesitas comprar materiales para seguir con tu negocio) o inicia un fondo de ahorro.
  • Que tus servicios o productos sean de calidad, es decir que tus clientes consigan el servicio que esperan, no olvides que la gente siempre prefiere lo mejor y con un excelente trato.
  • No te olvides que estás poniendo en juego tu nombre y reputación. Asegúrate de poder cumplir con el trabajo ofrecido y para ello siempre pide el soporte de tus padres, son quienes tienen la experiencia para darte el mejor apoyo siempre.

Recuerda que hay empresarios muy exitosos que empezaron su negocio desde jovencitos. Su secreto fue ser muy creativos y además hacer las cosas con mucha pasión, dedicando lo mejor de sí mismos para que sus productos sean únicos y especiales. Piensa en las cosas que más te gustan y sé muy observador respecto a las necesidades de las personas. Si logras satisfacer alguna necesidad y lo haces con agrado, con seguridad tendrás éxito en tu emprendimiento.

Fuente: junior achievement ecuador